LOS CRISTALES BLANCOS (SEGUNDA PARTE)

“Los cristales blancos equivocados: no es la sal sino el azúcar un factor etiológico en hipertensión y enfermedad cardiometabólica” 

SEGUNDA PARTE 

ESTUDIOS CLÍNICOS: Modificación en el consumo de azúcar y su efecto en indicadores relacionados a enfermedades cardiovasculares. 

  • En un estudio de 8 semanas se encontró que el aumento en el consumo de azúcar incrementó significativamente la presiónsistólica y diastólica.
  • El alta en el consumo de azúcar también tuvo un incremento significativo en los triglicéridos, en el colesterol y en las lipoproteínas de baja densidad,quienes se encargan de transportar el colesterol en la sangre.
  • De igual manera, el estudio demuestra que cuyos pacientes que consumieron el 28% de su energía de fuentes de sacarosa, es decir alrededor de 152 gramos de sacarosa al día, provenientes mayoritariamente de bebidas, por 10 semanas tuvieron un incremento significativo en peso (1.6 kg), en grasa de 1.3, y en la presión arterial(3.8 mm Hg sistólica y 4.1 mm Hg diastólica).
  • En cuanto a los efectos de los diferentes tipos de azúcares (sacarosa, fructuosa, glucosa), un estudio examino el efecto que tenía cada uno en la presión arterial. En cuanto a la sacarosa se encontró que su consumo incremento la presión por 9 mm Hg, mientras que la solución de fructuosa solo tuvo un incremento casi insignificante de 4 mm Hg, sin embargo, esta respuesta se puede deber a la poca absorción de la fructuosa cuando no esta acompañada de la glucosa.
  • En otra prueba se encontró que la bebida endulzada con una mezcla de fructuosa y glucosa tuvo un incremento más pronunciado en la hipertensión(15/9 mm Hg vs. 12/9 mm Hg) comparándolo con una bebida solamente endulzada con sacarosa. De igual manera, ambas bebidas incrementaron el ritmo cardiaco por 9 bpm (pulsaciones por minuto).
  • Otros estudios sugieren que la fructuosa puede ser especialmente nociva para el sistema cardiovascular. Mientras que el ingerir una solución de 60 gramos de fructuosa, incrementó la presión sistólica en (6.2±0.8 mm Hg), el consumo de la solución de glucosa no genero un cambio tan significativo, sin embargo, ambas bebidas tuvieron un gran impacto en la variación de la presión arterial, la cual induce un alto riesgo de un paro cardiaco.
  • La fructuosa puede generar otros daños cardiometabólicos.Otro estudio realizado con 74 hombres con una dieta alta en fructuosa por 2 semanas incremento significativamente la presión arterial, el ritmo cardiaco y los triglicéridos. 

UNA ADVERTENCIA CRITICA EN LA DIETA 

  • Es importante recalcar que únicamente los azúcares añadidos, encontrados en alimentos procesados y bebidas dulces, sean el problema,ya que, los azúcares, incluyendo a la fructuosa que se encuentra de forma natural en los alimentos como las frutas, es considerada benigna.
  • En un estudio se cambió de una alimentación normal a una alimentación que contenía 20 porciones de frutas, alrededor de 200 g de fructuosa y aun así se notó un decremento en la presión arterial.

NIVELES DE CONSUMO ACTUALES DE AZÚCAR Y PAUTAS EN LA DIETA

  • Hace 300 años los humanos consumían menos de uno kilo de azúcar por año. Estudios sugieren que hoy en día la población de EU consume entre 77 a 152 libras (35 a 69 kg) de azúcar por año.
  • Se consumen aproximadamente de 24 a 47 cucharaditas de azúcares añadidos diariamente.
  • En un estudio realizado a 1000 adolescentes americanos sugiere que el consumo diario de azúcares añadidos en niños es de 389 g y en niñas de 276 g. 
  • La Asociación Americana del Corazón (AHA)no hace ninguna recomendación especifica con respecto a la fructuosa, pero, recomienda no más de 6 cucharaditas de azúcar para una mujer y no más de 9 para un hombre.
  • La Organización Mundial de la Salud (OMS)de igual manera no menciona la fructuosa pero recomienda un consumo máximo de azúcares añadidos del 10% de nuestra dieta. Por cucharaditas la OMS sugiere entre 6-12 diarias, basada en una dieta de 2000 calorías. Esto es menor a la cantidad de azúcar que contiene una lata de 350 ml, que contiene 40 g de azúcar o 10 cucharaditas.
  • En el 2013 la AHA recomendó para reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares disminuir el consumo de sodio a 2400 mg/día con reducciones de hasta 1500 mg/día para reducir la presión arterial. Sin embargo, estas restricciones no solo pueden no obtener el resultado que se desea, sino que también distraen la atención del cristal blanco de mayor importancia.

CONCLUSIONES

  • Dietas altas en azúcares pueden contribuir sustancialmente a enfermedades cardiovasculares.
  • Mientras que azúcares de alimentos de fuentes naturales como en el caso de la fruta no parecen generar ningún daño, existe evidencia experimental que sugiere que los azúcares añadidos (principalmente aquellos altos en fructuosa) pueden generar daños severosen el sistema cardio metabólico y por ende deben estar explícitamente restringidos en nuestras dietas.
  • Los azúcares añadidos son probablemente mucho más importantes que el sodio para la hipertensión, la fructuosa específicamente incrementa el riesgo cardiovascular al incrementar la variabilidad en la presión arterial, la demanda de oxígeno en el miocardio, el pulso cardiaco y la inflamación.
  • Al igual que la mayor parte de nuestro consumo de sal no proviene de la sal de mesa, nuestro consumo de azúcar tampoco viene del azúcar de mesa, nuestro mayor consumo de ambos proviene de los alimentos procesadospor lo tanto, restringirlos en nuestra dieta es un gran primer paso.

“Los cristales blancos equivocados: no es la sal, sino el azúcar un factor etiológico en la hipertensión y enfermedades cardiometabólicas”

CONSIDERACIONES QUE HAY QUE TOMAR EN CUENTA*:

  • El azúcar puede llegar a tener mucho mayor impacto en la presión arterial que la sal.
  • Reducir la cantidad de sodio en los alimentos procesados puede tener un incremento en su consumo y por lo tanto mayor prevalencia de enfermedades cardio metabólicas.
  • Un gran consumo de azúcar incrementa la presión arterial sistólica en (6.9 mm Hg) y la diastólica en (5.6 mm Hg) en estudios mayores a las 8 semanas.
  • Beber 1 refresco de 600 ml puede incrementar la presión arterial hasta de 15/9 mm Hg y el ritmo cardiaco a 9 BPM (pulsaciones por minuto).
  • Aquellos quienes consumen 25% o más calorías de azúcares añadidos tienen un riesgo casi tres veces mayor de muerte por enfermedad cardiovascular.
  • Una dieta alta en fructuosa durante solo 2 semanas no solo aumento significativamente la presión arterial, sino también la frecuencia cardiaca, los triglicéridos, la insulina en ayunas e índice de evaluación del modelo homeostático (HOMA) (por sus siglas en inglés) una medida de la resistencia a la insulina y la función de las células β, la ingesta excesiva de fructuosa también a duplicado la prevalencia del síndrome metabólico.
  • Actualmente el americano promedio consume 2 – 8 veces más azúcares añadidos de lo recomendado por la OMS y la AHA, considerando específicamente a los adolescentes el consumo actual puede ser de 6 – 16 veces mayor.
  • El consumo de azúcares, incluyendo a la fructuosa en su contexto natural (es decir fruta) no solo no son dañinos, sino benéficos para la salud.

* Review. Cardiac risk factors and prevention.

Cita: DiNicolantonio JJ, Lucan SC. The wrong white crystals: not salt but sugar as aetiological in hypertension and cardiometabolic disease. Open Heart 2014;1:e000167. doi:10.1136/openhrt-2014000167.